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¡Ay dolor!, tu condicional amor

H

oy podr铆a contar las horas que podr铆amos estar juntos,

este dolor imperceptible en el pecho que no me ha dejado tranquila;

una y otra vez me interrogo la impotencia de tu presencia.


No quiero pensar que fui tu error,

responde desde lo profundo de tu coraz贸n,

¿hubieras preferido tu aceptaci贸n,

por parte de la mujer que tuviste ese fuego de pasi贸n?


¡Oh!, ya s茅, quiz谩s hubieras preferido, no, creo que no;

tengo tantas cuestiones y enigmas en mi mente

y todos ellos sin resolver desde que te fuiste.


Responde desde la contemporaneidad,

¿te es m谩s importante la vida o la muerte?

anhelo, anhelo escuchar tu voz.


A veces me imagino que est谩s conmigo,

como el d铆a de mi celebraci贸n primaveral,

la mujer de tu pasi贸n hab铆a reunido a todos,

a la familia, amigos e incluso a vecinos del pueblo.


M谩s mi mirada estaba puesta en aquella gran entrada,

eran ya las 11:30 de la noche y a煤n no aparec铆as,

inquieta preguntaba la hora a mi caballero,

no me cans茅 en esperarte porque llegaste solo en mi imaginaci贸n.


Te imagin茅 en las manos del abuelo,

aquellas que solo se acercaban para producirme cosquillas,

mientras la abuela sonre铆a en el sof谩;

a煤n ah铆 solo eras mi imaginaci贸n porque no eras t煤.


Desgarro un dolor penetrado en m铆 porque no est谩s conmigo,

si el creador me concediera un deseo, lo pedir铆a, 

lo siento, no puedo decirlo.


A煤n tengo marcas tuyas, no son posibles borrarlas;

yo no te odio, ¿solo podr铆as llamarme?,

Hoy, quisiera solo escuchar tu voz diciendo,

un te extra帽o, hija m铆a.


Autor: Ruby Cantos
Arte de Karen Copca


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