Fui qued谩ndome,
como la brisa en la ventana cerrada.
Fui nombr谩ndote en voz baja
para que no doliera tanto
cuando no respond铆as.
Y es que a veces el amor
no pide permiso,
s贸lo se instala,
aunque la casa est茅 llena de fantasmas
que no llevan tu nombre
pero s铆 tu memoria.
T煤 a ratos presente,
a ratos tan lejos
guardabas cosas que no eran m铆as
en rincones donde yo
intentaba florecer.
Yo no ped铆a promesas,
pero so帽aba con un s铆.
No por vanidad de anillos
ni por vestidos blancos,
sino por sentirme elegida
cuando no hab铆a nadie mirando.
A veces encontraba en tus ojos
una sombra que no era m铆a.
Y entend铆,
sin que me dijeras,
que hab铆a lugares de ti
donde nunca fui invitada.
Aun as铆, me qued茅,
no por ti,
sino por la fe antigua
de quien ama y no sabe irse
sin vaciar el alma primero.
Y hoy,
aunque me cueste,
empiezo a soltar
ese nosotros que nunca fue completo.
Porque t煤 fuiste viento.
Y yo tonta
quise hacerte ra铆z.
Autor Ruby Cantos Far铆as
Comentarios
Publicar un comentario